Déjame vivir en tu recuerdo.

   

 Cada tarde recuerdo tu rostro
me levanto y miro tu foto,
de a poco me partes el corazón
como si de un frágil vidrio se tratara
y por él mi vida se fugara.
 
    Me cuesta entender que estás lejos,
que abrazarte me es imposible,
que día a día eres solo un recuerdo,
un recuerdo incesante,  insufrible.
 
    No te miento, aún me haces falta,
¡me hace falta saber que estas por ahí!
No sé por qué me cuesta tanto
si de mi alma no te has ido,
si aún siento que estás aquí.
 
    Por favor vuelve, solo un momento
o vuelve a mi cada vez que quieras,
déjame vivir en tu recuerdo,
ya no me des más esperas.
 
    Quédate un segundo
un segundo que me enseñe a vivir
solo quiero un último abrazo,
un recuerdo que me haga feliz.
 
    Dime que todo va a estar bien
dime qué pronto dejará de doler,
prométeme que estarás conmigo el día
que me toque empezar otra vez.

        Hola, me llamo Daniela. He escrito este poema inspirada en el dolor de un olvido. Gracias por leerme.  Si te gustó puedes compartirlo, dejar un comentario en el blog o seguirnos.