La verdad de mis mentiras.



Lo peor de las mentiras no son las mentiras en sí,
sino las consecuencias que provocan,
los destrozos que dejan a su paso.

Las mentiras son como un coche sin frenos: 
pierdes el control y no tienes ni idea de dónde vas a estrellarte
ni a quién arrollarás en en el camino.

Son como un proyectil: 
una vez las disparas, no hay modo de hacerlas retroceder.
Algunas sobrevivirán al impacto.

Las mentiras son decisiones que tomamos,
cosas que callamos,
cosas que fingimos,
errores que cometemos para tapar otros errores.
por vergüenza.
¿por proteger a quien amamos?
¡Otra falsedad más!

Mentimos para protegernos a nosotros mismos
de las consecuencias que nuestras acciones tienen en los demás.
y acabamos atrapados en nuestra propia trampa.

        Hola, me llamo Yovanna. Gracias por leerme. Si te gustó mi poema puedes compartirlo, dejar un comentario en el blog o seguirnos.

Comentarios

Entradas populares