Te alejas más de mi

 

   

     En la luna llena de agosto, testigo silente de nuestra pasión, creamos un vínculo en la oscuridad que nunca desapareció. Nos decíamos "te amo" acompañado de besos anhelantes. Tu sonrisa brillante me cautivó y dejé de ser dueña de mis latidos. Nuestros cuerpos hablaron en lugar de nuestras palabras. El tiempo avanza implacable y nos sumergimos en sentimientos desbocados. Entregué mi ser sin reservas y encontré mi hogar y amor en tus brazos. Pero la tormenta llegó y el anhelo de un amor perfecto se desmoronó. Tus caricias se volvieron afiladas como espadas. Corazones heridos y almas cansadas buscando poner fin a esto. Aunque el dolor persistía, era mejor que el desliz.

    Enredados en un amor tormentoso, tejimos un vínculo desafiante entre lágrimas y abrazos. ¿Cómo podíamos pensar que esto terminaría? Cada mirada encendía una chispa ardiente de pasión inextinguible; en tus brazos florecía mi esencia. Te llamé "cura de mis flaquezas", pero ahora eras mi mayor debilidad. ¿Qué me sanaría de ti?

    Amar con dolor era un arte que no queríamos abandonar, pero tal vez ya no podía soportarlo más. Con suspiros y tristeza en los ojos, tomé fuerzas y dije adiós a nuestro idilio. Aunque te amaba con todo mi ser, era hora de dejarte volar. El dolor aprisionaba mi pecho y mi corazón sangraba en silencio. Nuestro amor apasionado no era suficiente para esta dolencia mortal. Nuestros ojos cristalizados me mostraron que no todo estaba perdido. Nuestras almas caminaban juntas sin un destino fijo. Cartas anónimas revelaban que tú eras el autor; las rosas se marchitaban a diferencia de nuestros recuerdos, y finalmente una luna llena anunciaba un nuevo ciclo sin ti. Al final, el amor perdió la batalla, dejando paso a un "hasta nunca" en lugar de un "felices para siempre".

    Este poema de despedida se eleva al viento mientras nuestra historia se convierte en un lamento.

        Hola, me llamo Nikol. Gracias por leerme. Si te gustó mi relato puedes compartirla, dejar un comentario en el blog o seguirnos.